La puntualidad
Si siempre te desespera
la espera
cuando una ofensa
precisa
la prisa
mejor no estar
apurado
ni atado.
Pues quien quiera
oír misa
bien sentado
ha de estar
acostumbrado
a ir a la iglesia
temprano
o verá a otro
cristiano
en su sitio acomodado.
©
Eduardo González Cuartango
07/06/2012
Ovillejo, el primer ovillejo que se conoce lo escribió D. Miguelde Cervantes, en el capítulo XXVII del Quijote, en el que Cardeno canta tres ovillejos.
ResponderEliminaranotado queda ese dato, Edu. lo leí y ahora no recuerdo, pero lo anoto.
ResponderEliminarde tu poema...jajaja. No creo que hoy día nadie se quede sin sitio en la iglesia. en poco tiempo no las habitará ni el polvo.
1 saludo.
Faltan fieles y sobran bancadas vacías, a eso les ha conducido su cerrazón y lejanía de lo que predican, sobre todo lejanía de las altas esferas de la curia.
EliminarUn abrazo.
Muy bueno es "chascarrillo" Edu.
ResponderEliminarY no creas Kapi que en el pueblo de mis padres aunque sobran bancos, y cada un@ tiene sitio, más vale que a nadie se le ocurra "quitárselo" que entonces las miradas matan :)
Besos.
A veces más que las navajas matan esas miradas, en los viejos y casi desiertos pueblos castellanos, donde el único día que se ven sus pobladores en la calle es cuando hay misa, a la cual acude hasta el comunista oficial del pueblo, el tener cada cual su sitio en la iglesia es una tradición que viene de generaciones anteriores y que marca el estatus de cada cual en la escala del poder que cada familia tuvo en tiempos ya olvidados.
ResponderEliminarUn abrazo, Tere.